Preguntas sobre malos olores durante el compostaje y cómo solucionarlos
1) ¿Por qué mi compostera está generando malos olores?
Una compostera en óptimo funcionamiento debe oler a pretricor o a un bosque en el amanecer. Los malos olores son indicios de que algo anda mal:
2) ¿Puedo agregar cáscaras de cítricos, lácteos, alimentos grasos, o alimentos malos a la compostera?
Sí se pueden agregar, sin embargo debemos evitar añadirlos a la compostera durante los primeros 10 días para permitir que se establezca una comunidad diversa de microorganismos. Debemos enfocarnos en el cómo y no tanto en el qué. Como si de una dieta equilibrada se tratara, a la compostera le debemos aportar la mayor variedad posible de residuos compostables disponibles. A mayor variación, mayor número de seres vivos entrarán en juego en el proceso de compostaje, estableciendo entre ellos un equilibrio dinámico que permitirá finalmente obtener un buen compost. Es decir, en la variedad está la calidad, no obstante es importante considerar que existen ciertos residuos que se deben agregar con mesura a la compostera:
Existen varios factores a considerar como la cantidad de residuo que desea agregar, los microorganismos dentro de la mezcla, la ubicación de la compostera o inclusive la sensibilidad de las personas a distintos olores. Cada caso es diferente, entonces nuestra recomendación es que pruebe agregar este tipo de residuos y basado en los resultados tome la decisión que más le convenga.
3) ¿En qué consiste la relación Carbono:Nitrógeno o cafés:verdes?
La relación Carbono:Nitrógeno del compost es un indicador utilizado para evaluar el desarrollo y calidad del compostaje. El valor de esta relación C:N debe encontrarse entre 25:1 y 40:1. Si esta relación es alta (alto contenido de carbono), generará un proceso de compostaje lento o casi detenido. Si más bien la relación C:N es baja (alto contenido de nitrógeno) generará malos olores como a amoníaco y una elevada presencia de fauna como gusanos y moscas.
En nuestros hogares no tenemos una manera precisa de monitorear esta relación, por lo que usamos como guía los materiales cafés y los materiales verdes. Los materiales cafés son ricos en carbono, aportan estructura y porosidad y absorben humedad. Algunos ejemplos son los comprimidos de aserrín, trocitos de madera, papeles u hojas muertas. Por su parte los materiales verdes aportan nitrógeno y son procesados rápidamente, ejemplos incluyen hojas verdes, cortes de pasto, residuos de frutas y verduras, y la broza del café.
Como regla general se tiene que una cantidad igual (por peso) de materiales verdes y materiales cafés brindará una proporción C:N idónea. Nuestra experiencia en el compostaje nos ha enseñado que al añadir nuestros residuos del hogar con la cantidad recomendada de material secante se produce una relación C:N adecuada, por lo que generalmente no debemos preocuparnos por manejar y monitorear esta relación, sin embargo, es importante conocerla para lograr identificar los problemas que puede ocasionar este desbalance y cómo solucionarlos.
4) ¿Cómo saber si el proceso va por buen camino?
Existen varias pistas que nos indicarán que nuestros residuos se están convirtiendo en compost eficientemente:
5) ¿Cómo saber si estoy agregando suficientes materiales secantes?
Los comprimidos de aserrín y otros materiales secantes al absorber el exceso de humedad, evitan que la mezcla dentro de la compostera sea viscosa y adhesiva, es decir mantiene el material suelto y oxigenado. Cuando no se agregan suficientes pellets en la compostera, la mezcla adquiere Una textura lodosa, lo cual evita la entrada de oxígeno y provoca malos olores.
La mejor forma de saber que ha agregado suficientes materiales secantes a su compostera es que el material dentro de esta tiene una textura suelta y ligeramente húmeda, lo puál puede constatar mediante la prueba del puño y que cuando gira la compostera puede escuchar al material cayendo y mezclándose.